Ya estamos en Agosto, mes caluroso y bohemio, mes en que ves a las gentes de aquí para allá con las maletas y bultos trajinando el equipaje, llegan las preciadas y temidas vacaciones ……… preciadas por el descanso bien merecido de todo un año de trabajo ( para algunos trabajo para otros un año de stress) todo depende de la situación y el carácter de cada persona, miras a tu alrededor y ves tu ciudad invadida por miles de personas extrañas y ajenas a tu mundo, gentes que quieren conocer tu ciudad …… mi ciudad, ciudad que deja de ser tuya por unos meses locos ciudad que es invadida por miles de personas que la pisotean, la maltratan que no entienden que aquí vivimos personas, que esto no es el tercer mundo para hacer todo lo que a ellos les dé la gana, gentes que en su ciudad respetan los horarios, respetan las vías públicas y respetan todo aquello que es suyo, pero llegan aquí, creyéndose que esto es el país de la pandereta que aquí está todo permitido, pues no, no lo está aunque lo parezca, pero este no es el motivo de mi entrada en el blog.
Mi entrada es solo para recordarme a mi misma que puedo tocar la luna con la punta de mis dedos, que puedo sentir y vivir........ y sobre todo que estoy dispuesta a hacerlo.
Yo como miles de personas buscamos un descanso, un oasis en nuestra vida aunque sea visitando otra ciudad, viendo otras caras y otras gentes, que igual que en la mía van con las maletas de aquí para allá.
Busco un oasis donde poder compartir por unos días, risas, conversaciones agradables sin tener que estar pendientes del reloj, sin tener que mirar para un lado o para otro, libre de las miradas, sintiendo en la piel el soplo fresco de la libertad.
Reencontrar el momento, ver otra vez la mirada y la sonrisa el saber que a fuerza de luchar y de querer podremos disfrutar de ese pequeño gran oasis en la ciudad, no importa la ciudad que sea, no importa ni el olor ni el sabor del aire, ni si la ciudad es bonita o fea, o si la gente pasa deprisa………….
Solo poder parar el reloj de tiempo, para disfrutar de ese preciado momento, de reencontrar palabras que ya no son dichas al viento, si no al oído entre el murmullo de la gente y simplemente ver la cara de felicidad……….
Oasis que fabricamos con ilusiones y pasiones, oasis que nos refresca la vida que nos cambia ese día a día por algo mas , oasis que construimos mano a mano y que quizás llegue el día en que en vez de ser un oasis prohibido sea el oasis de nuestra libertad.
