Dicen que la paciencia es un árbol de amargas raíces y de frutos dulces, dicen que la paciencia te ayuda a saber esperar…….
No sé si algún día llegare a tener los frutos dulces de la paciencia, pero ahora en estos momentos aun estoy por la amargura de las raíces.
Quizás sea una mujer muy exigente, tal vez pienso que la razón y el corazón van cogidos de la mano. Quizás pretendo demasiado quizá le pido a esta vida demasiado.
La verdad no lo sé, solo sé que las pocas ilusiones que tenia me las están negando, el saborear un buenos días, un hola quizás un buenas noches.
Pequeñas conversaciones que ayudan a llevar los momentos cruciales saboreando cada minuto, cada segundo………
Hoy solo siento la soledad y el silencio, el vacio de la ausencia. Por muy duro que este siendo el camino yo siempre lo he seguido, quizás mi carácter hace que mis palabras suenen a reproche, pero mis palabras están gritando que siento, que añoro, que anhelo, que siempre he seguido aquí……. ¿Paciencia es pedir demasiado?
¿Paciencia es querer volver a sentir sus manos?
¿Paciencia es volver a sonreír?
Que importa ahora que ya no haya futuro, existe el presente el día a día, el sentir la presencia, simplemente el volver a sentir aunque solo fuera un minuto……..
Cierto que cada uno es como es y que cada uno ama a su manera y que nadie afronta las situaciones igual.
Solo hay que darse cuenta de lo que somos, de lo que tenemos y de los que nos queda y disfrutar de cada segundo por muy cansados, abatidos o malhumorados que estemos y robarle a la vida cada segundo ……….